¿Por qué es importante que un niño disfrute su proceso de desarrollo y sea feliz en cada etapa?

No hay duda que para que haya una formación integral de los niños, es necesario no solo un colegio con las mejores prácticas académicas, sino también, que su prioridad sea el bienestar, tanto físico como psicológico de sus estudiantes.

Cuando hablamos de formación integral ¿a qué hacemos referencia? Nos referimos a niños con la capacidad de emprender proyectos exitosos, con las competencias necesarias para afrontar cualquier adversidad que se les presente, con sentido de responsabilidad social, plenos con su proyecto de vida, pero sobre todo, niños con la capacidad de ser felices y para lograrlo es imprescindible la relación entre Familia + Colegio.

Estudios científicos han demostrado que las experiencias vivenciales del niño, tanto en el ambiente escolar como en el familiar, son esenciales para su felicidad, por lo que es necesario que sus experiencias sean positivas.

Carolina Jurado, psicóloga docente del Politécnico Grancolombiano, manifiesta que para que un niño sea feliz, la clave está en respetar a las personas con las que se relaciona. De esta manera, podemos garantizar que su conducta será la misma en cualquier situación que se presente. “Un niño educado con amor, respeto, tolerancia, paciencia y argumentos claros y firmes es un niño sin máscaras, que se siente cómodo para decir las cosas que piensa frente a sus padres, con la convicción de que será escuchado porque sabe que siempre habrá espacio para la mediación y el diálogo”, explica Jurado.

Como ejemplo, podemos tener en cuenta el modelo educativo de Finlandia, que demuestra que los niños felices obtienen buenos resultados académicos. Finlandia, se encuentra en el primer lugar entre los países con mejores resultados en las pruebas Pisa, y su sistema escolar ( SEL o social and emotional learning) ha sido clasificado entre los mejores del mundo.

¿Por qué trabajar las emociones en el colegio contribuye a la felicidad de los niños?

Según la Doctora Lonka. Ph. D., profesora de psicología de la educación en la Universidad de Helsinki, las emociones:

  1. Contribuyen al proceso cognitivo, orientando la atención y la memoria.
  2. Logran que los estudiantes recuerden mejor.
  3. Activan la iniciativa para actuar.
  4. Ayuda a protegerlos de amenazas imaginarias o reales.
  5. Los invita a involucrarse en cosas que les parecen fascinantes.

Adicionalmente, los colegios deben contar con diferentes espacios y estrategias en las que los estudiantes se sientan libres de expresar sus emociones fuera del aula de clase. En el Gimnasio Los Portales, contamos con programas y espacios, desde prejardín hasta once grado, en los que nuestras estudiantes tienen la oportunidad de conocer sus habilidades, sentirse seguras de sí mismas y valiosas para la sociedad.

Jimena Quintero, Directora de Orientación Escolar, aclara que con “cada una de estas acciones buscamos que nuestras estudiantes construyan una vida con sentido y desarrollen habilidades sociales y afectivas que les permitan enfrentar los retos que ésta les exige y así, evitar cualquier riesgo de depresión, pero también, afrontarlo en caso que éste se presente. Como colegio nos centramos en la persona y damos prioridad al desarrollo emocional.”

Para muchos maestros, garantizar la aplicación de metodologías que permitan el aprendizaje de habilidades socioemocionales (social emotional learning o SEL), desde una edad temprana es clave para el futuro de los niños, ya que puede significar el desarrollo de habilidades que logren marcar la diferencia en sus vidas.

Un estudio de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) establece que, en Estados Unidos, los estudiantes que abandonan los estudios secundarios y validan su bachillerato a partir de un examen estandarizado, desarrollan menos habilidades socioemocionales que quienes completan el colegio. Estos jóvenes, comprueba el estudio, son más propensos a fumar, a divorciarse, a manifestar comportamientos violentos y a ser encarcelados.

Cada vez más son los colegios en el mundo que priorizan la educación emocional de sus estudiantes, consolidando así, currículos académicos que fomentan la formación integral y enfatiza sus esfuerzos en la felicidad de sus estudiantes, con el fin de formar personas empáticas, con conciencia social, relacionamiento interpersonal, extroversión y autoconocimiento.