¿Cómo es el desarrollo de las habilidades motoras finas de los estudiantes en etapa preescolar, en el Gimnasio Los Portales?

La motricidad fina es un conjunto de habilidades que aparecen desde el nacimiento de un bebé, la cuales permiten la coordinación de los huesos, músculos, tendones y nervios, para que el niño pueda realizar pequeños movimientos precisos. Éstas habilidades y movimientos intervienen en áreas vitales como el cerebro, la médula espinal, los nervios periféricos, los músculos y las articulaciones por lo que constituyen una parte vital de todo el proceso de pensamiento y desarrollo que acompaña el proceso de aprendizaje de los niños.

Las habilidades motoras finas, nacen de manera espontánea y aunque parezcan procesos sencillos, debemos tener en cuenta que sólo la mano se encarga de registrar nuestros movimientos neuro psico emocionales y realiza más de 5.000 micromovimientos, lo que quiere decir que a medida que el bebé va creciendo, va desarrollando diferentes movimientos hasta que logra conseguir un preciso control de la motricidad fina.

Las habilidades motoras finas pueden definirse como la columna vertebral de todos los procesos de aprendizaje a futuro. Un niño en los primeros cuatro años de vida, necesita experimentar con sus sentidos: necesita ensuciarse las manos, quitarse los zapatos, tener contacto con diferentes texturas, superficies, materiales, entre otros.

En el Gimnasio Los Portales entendemos la importancia del respeto por el proceso del desarrollo de las habilidades motoras finas, es por esto que, buscamos que los estudiantes que ingresan a preescolar continúen con su proceso de estimulación sensorial y motor fino que venían desarrollando desde su jardín infantil. Los estudiantes durante esa etapa no pueden sentarse en una mesa durante más de una hora, ellos necesitan cambiar de postura periódicamente; necesitan acostarse en el piso, tocar y enfrentarse o acercarse a diferentes materiales; y así de esta manera, logren establecer aprendizajes.

Ana María Cardona, Directora de Preescolar y Primaria, explica que en el preescolar del Gimnasio Los Portales, nos inspiramos en la metodología del Reggio Emilia, con la que logramos brindar a nuestros estudiantes una formación integral, por medio de un ambiente lúdico, vivencial y sensorial en el que se les permite aprender por medio de sus sentidos y experiencias, lo que permite el desarrollo de las habilidades motoras finas.

Teniendo lo anterior en cuenta, todas nuestras actividades del colegio se basan en los canales sensoriales. “Por ejemplo, en nuestra clase de música, los estudiantes tienen contacto con diferentes materiales sonoros tales como semillas de frutas, instrumentos artesanales; implementos de la cotidianidad que las hagan sentir el sonido de sus instrumentos. También contamos con clases de expresión corporal en las cuales se organiza y se estructura el proceso de movimiento de nuestras estudiantes”, comenta Ana María Cardona.

Estimular la motricidad fina en los niños va más allá de realizar trazos o ejercicios de caligrafía. Un niño que no tiene un proceso maduro de motricidad fina, es un niño que no está listo para asumir ciertos retos de la cotidianidad tanto académicos como personales. Las habilidades motoras finas son el canal para la manifestación de emociones ya que contribuirá en todas las destrezas que tenga el niño para realizar los movimientos y habilidades que vayan surgiendo a medida de sus experiencias.